Lucas Curotto se reencuentra con Barcelona en su Plan de Vuelo Tour

© Aura RGB

Rut Miralles

El cantante Lucas Curotto aterrizó el pasado 7 de abril en Barcelona, la ciudad que lo acogió años atrás cuando llegó a España desde Uruguay, pero esta vez para conquistarla por primera vez con su música. Así, el artista hizo escala con su Plan de Vuelo Tour en el Teatre Apolo, una sala que, sin estar llena del todo, vibró como si estuviera hasta la bandera. Aunque la rotura de una cuerda marcó el inicio de la noche, esta anécdota no fue impedimento para que el cantante transmitiera su emoción y su tan característica energía.

Curotto ofreció un directo cargado de buenas vibras, donde la complicidad con su banda y con el público convirtió el concierto en un encuentro íntimo y honesto. Con una puesta en escena simple, pero eficaz, consiguió que lo que brillara fuera su esencia: música, autenticidad y muy buen rollo.

Desde el primer momento, el artista se mostró agradecido e ilusionado por volver a Barcelona. Interpretó temas de su disco Plan de Vuelo, donde no faltaron Plan Suicida, Puente Aéreo, 26 de marzo o Camerinos, canción exclusiva del formato físico del disco. Uno de los momentos más especiales de la noche fue cuando bajó del escenario para cantar en acústico una versión de Fuiste Pa’ Mí, el primer sencillo del disco. Tampoco dejó pasar la oportunidad de reivindicar el uso del “t’estimo” frente al “te quiero”, un instante que fue aplaudido por sus fans.

Lucas aprovechó esa ocasión íntima para cantar algunas de las canciones más características de su paso por Operación Triunfo 2023, Perreo Bonito y Mariposa Tecknicolor, la cual dedicó a Noemí Galera, que se encontraba entre el público. La directora de la academia del talent en el que Curotto se dio a conocer no fue la única persona relacionada con el programa que estuvo presente durante la noche. El cantante contó con Manu Guix para interpretar «11 y 6» de Fito Páez.

Con una conexión constante con su banda, que transmitió la sensación de ser un grupo de amigos disfrutando de aquello que más les gusta, y un público entregado que no falló en ningún verso, Lucas Curotto demostró que sus canciones crecen en directo. Temas que ganan profundidad, vibran con fuerza y tienen la capacidad de alegrarte el día, además de regalar una canción inédita a todos los asistentes.

El lunes 7 de abril no fue un lunes cualquiera; fue una noche en la que el Teatre Apolo se convirtió en pista de despegue para un vuelo lleno de emoción, música y personalidad.