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Novedades 14 de febrero

Los Goya, el Benidorm Fest u Operación Triunfo se dan la mano en nuestra selección de novedades de esta semana. Con ritmos que van desde la salsa al indie, con homenajes a Massiel o a García Lorca y con colabs que no dejan a nadie indiferente. Aquí os dejamos nuestro top 10 de novedades de la semana pasada: escúchalas todas en nuestra playlist!

“Mis ídolos están en mi casa”, Marquitos

Oddliquor abandona su alter ego para convertirse en Marquitos en “Mis ídolos están en mi casa”. Con una letra que, como todas las suyas, nunca decepciona, y su manera tan particular de contar historias, el madrileño rinde un doble homenaje a los suyos en su nueva etapa artística. Por un lado, adoptando el nombre de Marquitos, ya que es así como lo conocen sus familiares y personas más cercanas; por el otro, recordando que él siempre tiene claro quién es su gente y cuáles son sus valores. Musicalmente la canción opta por navegar a través de todas las capas a las que nos tiene acostumbrados el artista, aunque en esta ocasión, aparentemente, manda la sencillez. Con una guitarra, un bajo y una base que navega entre la psicodelia, la distorsión y la ligereza, su voz sigue transportándonos en un viaje que siempre merece la pena. Funciona muy bien el contraste entre una letra que habla de hermetismo y de aferrarte a tus raíces, y la apertura de la melodía, que incluso deja un final libre que nos sugiere que, aunque Marquitos siga siendo el de siempre, quizás está aprendiendo a dejar un resquicio para todo lo nuevo que se viene. El videoclip funciona como un complemento ideal para el tema. Él solo, sentado en una alfombra acogedora que transforma un trailer en un hogar, donde se siente cómodo haciendo su música y se desplaza en una “casa” itinerante en la que siempre está a salvo.

Aunque ahora cambie de nombre, concluimos afirmando que Marquitos mantiene estilo y temática en esta nueva propuesta en la que no olvida la etapa anterior. Y lo manifiesta no solo con el guiño explícito a su tema “Pisando charcos” en la letra, sino también siendo consciente de que en el futuro siempre va a ser él. Porque su objetivo sigue siendo contar sus vivencias a través de las notas: “Oddliquor hizo música mu’ buena, y Marquitos música pa’ que no la olvides”.

“Bella Rareza”, de Chica Sobresalto

Es una canción que refleja a la perfección la esencia de la artista, con una letra poética que nos invita a aferrarnos a cualquier cosa que nos distraiga de la muerte, transmitiendo una mezcla de pesimismo y conformismo pero con un mensaje inconsciente de esperanza que nos cala a través de la instrumental. La producción, muy cuidada, incluye toques psicodélicos que enriquecen la atmósfera, mientras que la voz desnuda de Chica Sobresalto al inicio te atrapa y, poco a poco, te va sumergiendo en la canción.

La instrumental hacia el final la canción pierde algo de fuerza, lo que frena un poco su impacto. Sin embargo, «Bella Rareza» sigue siendo perfecta para momentos de introspección diaria, como cuando viajas en el bus y te dejas envolver por su delicado y profundo universo sonoro.

“VERDE”, de Lola Índigo

Este sorprendente tema, que fue publicado el lunes pasado por sorpresa, supone una reinterpretación moderna del famoso poema «Verde que te quiero verde» de Federico García Lorca, presentada inicialmente en su actuación en los Premios Goya 2025 en Granada. La canción fusiona la esencia del poema con la versión de Manzanita, rindiendo homenaje tanto a la figura de Lorca como a la tierra andaluza de su amada Granada. La instrumental, con cajón, palmas y coros, mantiene un aire flamenco que encaja perfectamente con el registro más tradicional que Lola Índigo adopta en este tema, conectando de manera profunda con sus raíces andaluzas, como ya hizo en su álbum GRX, pero sin perder su esencia y lo que la diferencia.

Aunque el tema es un hermoso regalo para sus fans, lo que se percibe como un punto débil es que, en la interpretación en los Goya, con todo el despliegue visual y coreográfico, logró capturar la magia del momento con su energía y su presencia escénica característica de Lola Índigo, pero el tema en plataformas digitales se siente más descafeinado en comparación. A pesar de esto, es una apuesta interesante que, aunque no tan impactante en su formato de estudio, sirve como un guiño a sus raíces y a su capacidad para reinventar clásicos de manera única.

“First love”, de Will Smith e India Martínez

Esta semana las novedades traen una de las colaboraciones más bizarras e inesperadas. 

Los aires flamencos y la voz pura de India Martínez se combinan con el flow y el rap de Will Smith. Esta unión aparentemente imposible deja un tema que, contra todo pronóstico, funciona. Las guitarras y los jaleos no abandonan nunca el segundo plano de una melodía que comienza con un punteo flamenco y con los giros de agua clara de India. Su voz nos engaña llevándonos en una dirección, hasta que justo después de mencionar a Camarón irrumpe la voz grave del famoso actor y cantante para llevarnos a un universo completamente diferente. Una vez dentro descubrimos que, a pesar de todo, es más que posible fluir en inglés a ritmo de palmas.

I want that first love, you know that first time” es un mantra que se repite mezclando no solo dos idiomas, sino la raíz más andaluza con los ritmos del Bronx más neoyorquino. La cadencia de la voz de Will Smith va envolviendo al oyente, hasta que, en una sorpresa más, India nos enseña que también es capaz de rapear. A su manera. Entre los dos y con la ayuda de los maravillosos sonidos de la guitarra de Marcin, construyen esta rara joya que quizás no está hecha para los oídos del gran público. Pero que derrocha arte por los cuatro costados.

"La Perra de Despeñaperros”, de María Pelae ft. Jedet

Este tema marca un regreso potente para María Peláe, quien renace con un sonido más crudo y visceral, un giro brillante respecto a lo que nos tiene acostumbrados. Aquí, la artista no solo muestra su garra intacta, sino que también revela una versión más pura y auténtica de sí misma. Su voz, llena de carisma, se acompaña de un videoclip cargado de actitud que refuerza el empoderamiento que la canción irradia. La colaboración con Jedet en el rap es acertada, aportando un toque rebelde que refuerza la fuerza de la pieza, transmitiendo una lucha constante, tanto personal como colectiva.

La instrumental, furiosa y llena de energía, es el acompañamiento perfecto para el concepto de empoderamiento y resistencia que define la canción. Sin embargo, el puente se siente un poco “out”, rompiendo momentáneamente la atmósfera que el tema construye con tanta intensidad. Igual era la intención, pero a nosotros nos “saca” un poco del tema. La letra… da para un TFG, y lamentamos comunicar que este portal no se atreve a analizarlo en apenas unos párrafos; es tan audaz y provocadora que puede resultar polarizante: o te atrapa y te fascina, o te deja completamente perplejo. Lo cierto es que este es un tema que, sin duda, provoca y no deja indiferente.

La Perra de Despeñaperros soy yo. Y punto.

“Plan suicida”, de Lucas Curotto

Esta propuesta evoca claramente el pop español de los 90 y 2000, con una estructura simple y una letra directa, que aunque efectiva, no deja de ser algo básica. Lo que más destaca es la honestidad de la propuesta: Curotto se muestra tal cual es, sin pretensiones, algo que también refleja en el videoclip, que sigue la misma línea estética de sus trabajos anteriores. Su voz, que ya se ha convertido en una de su marca personal, brilla con fuerza y transmite autenticidad, algo que se percibe claramente en la canción. Se hace muy reconocible a Lucas a través de su voz.

Sin embargo, la canción no aporta nada particularmente novedoso ni dentro de su propio proyecto ni al panorama musical más amplio. Se siente como una pieza más en su repertorio, sin grandes innovaciones o riesgos. Aunque no sorprende, esto es lo que buscamos en Lucas, y esto es lo que el artista nos da. Nos quedamos expectantes de ver cómo encajarán todos los elementos de su propuesta global en el próximo álbum, por lo que, en resumen, «Plan Suicida» funciona como una carta de presentación honesta, pero estamos seguros de que Lucas Curotto aún tiene mucho más por ofrecer.

“El amor”, de Rigoberta Bandini

Este tema es un impresionante regalo en su versión de estudio de la actuación que presentó en los Premios Goya 2025. Hacerle un homenaje a una canción tan icónica de Massiel no es tarea fácil, pero Rigoberta tiene el carisma y la pasión para hacerlo. La canción va creciendo progresivamente, modernizándose con unos arreglos contemporáneos que la traen al siglo XXI, mientras Rigoberta desgarra su voz para darle toda la emoción necesaria, reforzada por unos coros que amplifican la intensidad del mensaje. Su interpretación vocal es impecable, y la forma en que transmite la dualidad del amor, tan profunda y emocional, es sencillamente cautivadora.

El final, con los trinos de los pájaros y el fade out instrumental, crea una atmósfera tan intensa que pone el vello de punta. La actuación en directo, tan característica de Rigoberta, se convierte en un espectáculo visual que es pura expresión artística: o te fascina o te desconcierta, pero no te deja indiferente. La canción no solo es una versión de una obra clásica, sino una pieza de arte en sí misma. Es imposible criticarla (aunque haya quien lo intente, buena suerte en ello), ya que todo en ella, desde la interpretación vocal hasta la producción, se siente como una obra completa y única.

“Luces encendidas”, de Yoly Saa

Esta semana la gallega Yoly Saa estrena proyecto, y con él este tema incluido en su nuevo trabajo “Mar de Ardora”. Poca gente sabe que este fenómeno convierte el agua del mar en un espectáculo luminiscente gracias a unas algas que brillan en la oscuridad. Y de esta misma metáfora bebe “Luces encendidas”, una canción que cuenta la historia de alguien que quiere esconderse porque esas luces son un espejismo que se asoma tan solo de forma inesperada.

La letra es el punto fuerte de este tema en el que Yoly Saa reflexiona sobre la dualidad entre lo que los demás ven y la realidad de lo que realmente está ocurriendo dentro de ti. La instrumental va y viene, subiendo para apoyar los coros de la artista y casi desapareciendo en otros momentos para acabar trayendo una percusión que rompe esa atmósfera celestial. Una atmósfera que los tambores acaban destruyendo cuando la artista se rebela contra esos focos que quiere apagar, aunque los demás no estén dispuestos a permitírselo. El punto fuerte de “Luces encendidas” es la voz de la gallega, que se siente muy cómoda en este registro etéreo, vestido casi de irrealidad.

Quizás el punto débil es la duración del tema, que hay que disfrutar dejándose llevar y sin esperar ninguna conclusión. Solo las reflexiones al aire que se dejan caer como al descuido sobre las ilusiones gastadas, los lloros en la cama y lo que nadie ve cuando todo lo accesorio desaparece y cae el telón.

“Cómo dolía”, de NIA y st. Pedro

Es una salsa clásica que se siente como un homenaje fiel al género, con una química vocal impecable entre ambos artistas. Sus voces se complementan perfectamente, fusionándose con la energía y el sabor característicos de la salsa, creando una armonía que atrapa desde el primer compás. La instrumentación, con los vientos y la percusión al frente, encaja a la perfección con las composiciones más célebres del género, transportando al oyente a un clásico ambiente de salsa vibrante.

Sin embargo, aunque la canción está llena de virtuosismo y buen gusto, algo se echa de menos (además de un videoclip): más «guasa», más son cubano, más jaleo. La canción podría haberse beneficiado de una dosis extra de sabor y desenfreno, para elevar aún más su autenticidad y energía. A pesar de eso, lo que realmente resalta de «Cómo dolía» es lo bien que se complementan NIA y st. Pedro, dándole un toque fiel al género, que respeta su esencia y demuestra el talento de ambos.

“No te enamores”, de Xavibo

«No te enamores» marca el regreso de Xavibo con un tema introspectivo y sin pretensiones, que aborda la dolorosa realidad del desamor. Este tema nos presenta el amor romántico clásico que todos en secreto anhelamos alguna vez en mayor o menor medida, representado muy acertadamente en las grandes historias amorosas en París a través del videoclip, pero presentándonos también la parte más dolorosa de este amor. La canción nos recuerda la cara amarga de este sentimiento, mostrándonos de forma honesta cómo incluso lo que una vez fue un amor idealizado puede convertirse en una vulnerabilidad y en cicatrices, algo que todos hemos experimentado en algún momento.

La voz de Xavibo, aunque no destaca por su potencia y se deja más bien tirada, se adapta muy bien a la canción, transmitiendo la melancolía y resignación que requiere el mensaje. La instrumental, aunque sencilla, es efectiva, acompañando tanto la letra como la timidez vocal del artista. El tema es directo y se disfruta por su sinceridad.

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